Camino Real de Cruces en Panamá: ¡Un viaje al pasado en medio de la selva!

¿Sabías que en pleno corazón de Panamá existe una ruta histórica que te lleva directo al pasado colonial? ¡Así es! El Camino Real de Cruces es uno de los senderos más icónicos que cruzaban el istmo panameño hace siglos, conectando el Mar Caribe con el Océano Pacífico. 

Este era el “corredor de los tesoros” que, junto con el Camino de Portobelo y el de Nombre de Dios, se usaba para transportar mercancías y riquezas de un océano al otro. 

Hoy en día, aunque ya no vemos piratas ni mulas cargando oro, podemos recorrer el mismo camino para descubrir sus historias y admirar la belleza de su entorno natural. ¿Listo pa’ la aventura?

La historia detrás del Camino de Cruces

Imagina que estamos en 1530. Desde la ciudad de Panamá, los aventureros, comerciantes y soldados iniciaban un recorrido por tierra a través de este camino empedrado hasta llegar a la Venta de Cruces, a orillas del Río Chagres.

 ¡De ahí, directo al fuerte de San Lorenzo en botes, y luego al mar Caribe! Esta ruta se convirtió en una alternativa crucial cuando el Camino de Portobelo estaba hasta el tope de tráfico. ¡Quién diría que en aquella época ya había tranques!

Dato curioso: Tras el saqueo de Panamá la Vieja en 1671 por el famoso pirata Henry Morgan (sí, el mismo de las películas), el camino se rediseñó para conectar con la nueva ciudad en lo que hoy es el Casco Viejo. ¡Ese fue todo un cambio de dirección!

El Camino de Cruces hoy: naturaleza y aventura

Hoy el Camino de Cruces no es solo historia, es un excelente destino de senderismo. Desde la Venta de Cruces hasta el Casco Viejo, recorres aproximadamente 36 kilómetros llenos de naturaleza selvática. 

La ruta está señalizada con marcadores de color naranja, y es perfecta para hacer trekking, caminar, e incluso observar aves. Este sendero es especial porque, a diferencia de otros, mezcla historia y naturaleza. 

Imagínate caminando entre árboles gigantes y cruzando riachuelos, mientras pisas las mismas piedras por donde pasó el oro de la época colonial. ¡Qué lujo de experiencia!

¿Cómo llegar al Camino de Cruces?

El tramo mejor conservado del Camino de Cruces se encuentra en el Parque Nacional Soberanía, y su punto final es en Venta de Cruces. 

Para llegar aquí, solo sigue la carretera Madden (hacia la Transístmica), y en el kilómetro 6.3, a mano izquierda, encontrarás el estacionamiento donde empieza la caminata. Este es un buen lugar para dejar el carro y prepararse para la caminata.

Información del sendero: ¿Qué debes saber?

El Camino de Cruces tiene algo para todos, pero también demanda un poquito de esfuerzo. Veamos los detalles:

Temporada seca vs temporada de lluvia

  • Temporada seca: Este es el mejor momento para visitarlo, ya que los riachuelos están bajos y el camino es más fácil de seguir.
  • Temporada de lluvia: Aquí es donde la cosa se pone divertida. El sendero se vuelve resbaladizo, y los riachuelos pueden alcanzar la mitad de tu pantorrilla. Si decides ir en esta época, ¡llévate botas y prepárate para ensuciarte!

El recorrido del Camino de Cruces paso a paso

Al empezar, encontrarás una primera sección con subidas y bajadas no tan pronunciadas. Después de caminar unos 4.1 km, llegarás a la intersección con el Camino de Plantación. Aquí tienes varias opciones para continuar:
  1. Seguir hasta las ruinas de Venta de Cruces: Una caminata adicional de 6 km. Ojo, esta parte no está bien señalizada y podrías perderte, así que coordina que te recojan en bote en el Río Chagres si no quieres regresar caminando.
  2. Tomar el Camino de Plantación: Otro tramo de 6.5 km. Este camino te llevará de regreso al punto de inicio, pero asegúrate de tener un transporte para cuando termines.
  3. Regresar sobre tus pasos: Esta es la opción más segura si no tienes un bote esperándote ni quieres caminar 12 horas.

Facilidades y consejos útiles

El parque ofrece áreas de descanso, como bohíos, bancas y mesas en el estacionamiento. Lleva agua suficiente, algo para picar y buen calzado de trekking. Además, considera ir en grupo, ya que algunos tramos pueden ser desafiantes, y siempre es mejor compartir la experiencia y tener una red de apoyo por si acaso.

Reflexiones finales

Recorrer el Camino de Cruces es como caminar por un museo natural y abierto, donde cada piedra tiene una historia que contar. Desde los restos de antiguos empedrados coloniales hasta las maravillas naturales que encontrarás en el Parque Nacional Soberanía, esta es una experiencia única que te hace sentir parte de la historia de Panamá.

Así que si eres amante de la historia, la naturaleza o simplemente buscas una escapadita al aire libre, el Camino de Cruces te espera con los brazos abiertos. Prepara tu mochila, ajusta tus botas y lánzate a explorar esta joya histórica. ¡Dale que te espera un recorrido espectacular!

Preguntas frecuentes

El Camino Real de Cruces es una ruta histórica que te lleva de vuelta a la época colonial en Panamá. Era el camino que usaban para mover mercancías entre la ciudad de Panamá y el Caribe. Hoy en día, ¡es un lugar ideal para los que aman el senderismo y disfrutar de la naturaleza!

La duración del recorrido depende de dónde empieces y tu ritmo. En promedio, puedes tardar entre 4 y 6 horas en completar el camino. ¡Te aconsejo empezar temprano para que aproveches bien el día y no te quedes a oscuras!

 Esta ruta tiene una dificultad moderada. Hay partes que pueden ser un poco resbaladizas o con subidas y bajadas. Así que, mejor ven con buen ánimo y buena condición física, y asegúrate de llevar unos zapatos de senderismo que te hagan sentir cómodo.



 A lo largo del Camino Real de Cruces, te encontrarás con restos de la calzada de piedras de antaño, ríos hermosos, vegetación abundante y una fauna bien variada. No te pierdas el río Chagres y las ruinas coloniales, ¡que son pura historia!

 ¡Sí, es seguro! Pero lo mejor es que vayas en grupo o con un guía que conozca la zona, especialmente si es tu primera vez. No olvides chequear el clima antes de salir, porque en época de lluvias el camino se puede poner un poco complicado.

 Lleva agua, algunos snacks para picar, protector solar, repelente de insectos y un botiquín básico por si acaso. También sería útil llevar un mapa, un GPS o tu celular cargado, para que no te pierdas, especialmente si es tu primera vez. No olvides chequear el clima antes de salir, porque en época de lluvias el camino se puede poner un poco complicado.

 La mejor época para recorrer este camino es durante la temporada seca, que va de diciembre a abril. En esta época, el camino es más fácil de seguir y no se te complicará la vida con el barro. Si es tu primera vez no olvides chequear el clima antes de salir, porque en época de lluvias el camino se puede poner un poco complicado.

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